• El  movimiento social por la justicia climática portugués organiza una acción para exigir el decrecimiento de la aviación y  una transición que priorice el  ferrocarril.
    • La plataforma ibérica Rebelión por el Clima apoya la acción y hace suyas las demandas portuguesas.
    • Activistas del Estado español participarán en la acción de desobediencia en Lisboa.

Hoy, 22 de mayo, la acción «Em Chamas» salió de la terminal de llegadas del Aeropuerto Humberto Delgado, en Lisboa,  para bloquear la Plaza del Aeropuerto de forma pacífica, en una acción de desobediencia civil masiva. 

Las activistas de Portugal, acompañadas por una delegación de Rebelión por el Clima en España,  reivindican la prohibición de la construcción de nuevos aeropuertos; un plan que garantice el trabajo y la reconversión para todas las personas que trabajan en el sector de la aviación; además de un plan de electrificación total y extensión del ferrocarril en Portugal a todas las capitales de distrito en los próximos tres años.

Estas demandas  fueron entregadas el pasado 13 de mayo al Ministerio de Infraestructuras y Vivienda a un adjunto del ministro Pedro Nuno Santos, que fue informado in situ de que la protesta podría ser desconvocada si se aceptan al menos la mitad de las demandas de cada pilar mediante compromisos oficiales por escrito.

«Al tiempo que la ciencia y los criterios de justicia social nos dicen que Portugal necesita reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero en un 74% para 2030, el Gobierno muestra su hipocresía prometiendo reducir las emisiones pero aumentándolas, ampliando aeropuertos», manifestó Diogo Silva, uno de los portavoces de la acción. «Nuestra casa está en llamas, las personas menos responsables son las que primeros sufren los problemas, y el plan del Gobierno portugués es encender la estufa en lugar de apagar el fuego», continúa, y añade que «es urgente rescatar a los trabajadores y rescatar el planeta simultáneamente, porque intentar recuperar la normalidad en la aviación es garantizar el colapso climático, la ciencia lo tiene muy claro y el coste social y medioambiental previsto es inaceptable». 

La acción promovida por Climáximo cuenta con el apoyo y complicidad de la plataforma ibérica Rebelión por el Clima, una plataforma que ha contado desde el inicio con el apoyo de la organización portuguesa . Además se han desplazado a Lisboa activistas de Salmorejo Rebelde plataforma que apoya también de RxC.Para estos movimientos, las demandas son compartidas, así, el desmantelamiento del tren convencional en el Estado español, el fin de los trenes nocturnos y la desaparición del único tren que unía Madrid y Lisboa (Lusitania) y Portugal y Francia  (Lisboa-Hendaya) no solo son un problema ibérico, sino del conjunto de la Unión Europea. Mientras la industria de la aviación recibe  rescates millonarios, desaparecen modos de transporte más sostenibles y que dotan de importantes servicios a las zonas más despobladas.  La emergencia ecológica exige tomar medidas en la dirección opuesta: reducir los viajes en avión y facilitar desplazamientos en el tren. Es incomprensible que Portugal haya perdido la única conexión ferroviaria con el centro europeo. La ciencia es clara en establecer que las políticas e inversiones que sigan dirigiendo la movilidad internacional hacia el sector aéreo son una irresponsabilidad climática, ecológica y social.

 

Última modificación: 22 de mayo de 2021